Se necesitan varias, muchas, para apreciar sus virtudes.
Resulta muy interesante la complejidad en ritmos, la energía y visceralidad instrumental, la intensidad lírico-poética de su texto y voz, el énfasis en atmósferas y un enfoque épico-experimental que impide digerir sus composiciones en una o dos escuchas. Sus discos son como una amalgama entre heavy metal, música progresiva, rock alternativo, grunge y psicodelia (si es que estos estilos no se fusionan entre sí ya por naturaleza), como un cóctel (con personalidad propia) de Black Sabbath, King Crimson, Soundgarden, Pink Floyd y Jane’s Addiction. Tool siempre ha sido difícil de categorizar si es que hay que categorizar a alguien más allá de cuatro pistas sónicas para el neófito. Metes en una coctelera riffs de Led Zeppelin, desarrollos de Pink Floyd junto con compases de King Crimson, con una vuelta de tuerca al metal alternativo y al metal progresivo, con letras densas, casi religiosas. Pocos grupos me vienen a la cabeza que posean un estilo tan propio y que difícilmente puedas describir haciendo referencias a terceros. Una banda siempre envuelta en una mística y con un halo, o mejor aún aura, que los hace inclasificables, y probablemente irrepetibles. Aquí, un trabajo que no puede faltar en el espacio cabezón. Veintisiete años son aproximadamente diez mil días y de allí Tool saca el título para éste, el LP más intimo y personal de su discografía, más allá de los supuestos enigmas y misterios de este disco. Judith Marie, madre de Maynard James Keenan, sufrió un aneurisma que la dejo parcialmente paralizada por veintisiete años hasta su muerte, período en que se arraigó de manera ferviente a su religión durante todo su padecimiento.
El título del álbum se refiere al período que va entre el comienzo de la parálisis de la madre del cantante (quedó paralítica en los 80) y el momento de su muerte en 2003, una experiencia que inspiró este disco. Este es uno de los discos más atmosféricos y psicodélicos de la banda, con muchas letras personales. Tan primales y viscerales como complejos, una de las bandas más herméticas del planeta, con algunas de las letras más punzantes del rock, y un desbordante arte gráfico que acompaña la música y la lírica -incluso este disco se acompaña con lentes incorporados para ver el booklet en 3D-, digerir completamente cualquier disco de ellos no es algo sencillo, pero tampoco tan complicado como otras cosas que circulan por aquí. Hace 13 años que Tool estrenó su álbum "10,000 Days", en el 2006, uno de los favoritos de sus fieles seguidores.